Títulos de los que se compone la obra:
El hundimiento de la Casa de Usher
El escarabajo de oro
El rey Peste
Hop-Frog
La aventura sin par de un tal Hans Pfaall
La carta robada
El descenso dentro del Maelstrom
El método del doctor Alquitrán y del profesor Trapaza
Una historia de las montañas Ragged
El enterramiento prematuro
Ligeia
El caso del señor Valdemar
Breve charla con una momia
Metzengerstein
La cita
Coloquio entre Monos y Una
El Ángel de lo Estrambótico
Revelación mesmérica
La posesión de Arnheim o El paisaje del jardín
La quinta de Landor
Berenice
Cuatro bestias en una
El hombre de la multitud
Eleonora
El poder de las palabras
La semana de los tres domingos
Conversación de Eiros con Charmión
Morella
La esfinge
Una narración de Jerusalén
Guillermo Wilson
El cajón oblongo
El Jugador de Ajedrez de Maelzel
El pozo y el péndulo
El gato negro
El misterio de María Roget
Elegancias
Manuscrito hallado en una botella
La isla de la hada
El demonio de la perversidad
El retrato ovalado
El barril de amontillado
La máscara de la Muerte Roja
El diablo en el campanario
Sombra
Silencio
El corazón revelador
Los crímenes de la rue Morgue
Edgar Allan Poe (1809-1849) quedó huérfano desde muy joven; su padre abandonó a su familia en 1810 y su madre falleció al año siguiente. Tanto su obra como él mismo quedaron marcados por la idea de la muerte, y la estela de la desgracia no dejó de acecharlo durante toda su vida. Antes de cumplir los veinte ya era un bebedor consuetudinario y un jugador empedernido, y contrajo enormes deudas con su padre adoptivo, además de causarle todo tipo de problemas. En 1827 publica Tamerlán y otros poemas y en 1830 se instala en la casa de una tía que vivía en Baltimore acompañada de su sobrina de once años, Virginia Clemm, con quien se acabaría casando siete años más tarde. Trabajó como redactor en varias revistas de Filadelfia y Nueva York, y en 1849, dos años después de la muerte de su esposa, cae enfermo y fallece preso de la enfermedad y su adicción al alcohol y las drogas. Su producción poética, donde muestra una impecable construcción literaria, y sus ensayos, que se hicieron famosos por su sarcasmo e ingenio, son destellos del talento que lo encumbraría a la posteridad gracias a sus narraciones. Poe, de hecho, es conocido sobre todo por sus relatos y por ser el predecesor, en cierto modo, de la novela policíaca moderna. Sus cuentos destacan por su belleza literaria y por fundir en ellos lo macabro con el humor, el terror y la poesía.